El 08 de marzo del año 415: en Alejandría (Egipto), una turba furiosa lapida a la filósofa, astrónoma y escritora egipcio-romana Hipatia.
Hipatia nació en Alejandría, capital de la diócesis romana de Egipto. No se conocen datos acerca de la madre de Hipatia, salvo que murió en un parto.
Su padre, Teón de Alejandría, filósofo y matemático se dedicaba a la investigación y a la enseñanza en el Museo de Alejandría, fundado por Ptolomeo. Este Museo tenía mas de cien profesores que vivían allí y muchos más que asistían periódicamente como invitados.
Según registros de la época, Teón deseaba que su hija fuera un ser humano perfecto y se preocupó de que recibiera una educación científica muy completa.
Aunque Hipatia viajó a Atenas e Italia para recibir algunos cursos de filosofía, se educó en el propio Museo y formó parte de él hasta su muerte.
Hipatia vivió desde su infancia en un ambiente académico y culto, aprendió matemáticas y astronomía de su padre, quien además le transmitió su pasión por la búsqueda de lo desconocido.
Dotada de una gran belleza, se dedicó también a un exhaustivo cuidado de su cuerpo, mediante una rutina física diaria que le permitía mantener un cuerpo saludable así como una mente activa.
Pese a sus notables cualidades físicas e intelectuales, rechazó casarse, a fin de entregarse por completo a la ciencia.
Cultivó variadas disciplinas: filosofía, matemáticas, astronomía y música. Durante veinte años se dedicó a enseñar todos estos conocimientos en el Museo de Alejandría e incluso llegó a dirigirlo alrededor del año 400.
Teón
Su carácter singular de mujer entregada al pensamiento y a la enseñanza le valió el aprecio general. Educó a una selecta escuela de aristócratas que ocuparon altos cargos.
Escribió libros sobre geometría, álgebra y astronomía y mejoró el diseño de los primitivos astrolabios.Además de cartografiar cuerpos celestes, confeccionando un planisferio, también se interesó por la mecánica.
Ninguna de sus obras se ha conservado, pero se conocen gracias a sus discípulos, como Sinesio de Cirene o Hesiquio de Alejandría:
Comentario a la Aritmética en 14 libros de Diofanto de Alejandría. Canon astronómico.
Comentario a las Secciones cónicas de Apolonio de Perga.
Tablas astronómicas: revisión de las del astrónomo Claudio Tolomeo.
Edición del comentario de su padre a Los Elementos de Euclides.
Se dedicó a la enseñanza de la filosofía, centrándose en las obras de Platón y Aristóteles. La casa de Hipatia se convirtió en un lugar de enseñanza donde acudían estudiantes de todas partes del mundo conocido, atraídos por su fama.
Orestes se dejaba aconsejar por Hipatia en los asuntos políticos. El retórico Damascio escribió que Hipatia fue popular como consejera de las más altas magistraturas de Alejandría. Su alumno Hesiquio sentencia que era adorada y reverenciada en Alejandría: "Vestida con el manto de los filósofos, abriéndose paso en medio de la ciudad, explicaba públicamente los escritos de Platón, o de Aristóteles, o de cualquier filósofo, a todos los que quisieran escuchar (...) Los magistrados solían consultarla en primer lugar para su administración de los asuntos de la ciudad..."; añadía que había recibido "muchas distinciones cívicas".
Su fidelidad al paganismo en el momento de auge del cristianismo como nueva religión del Estado, fue la causa de su muerte a manos de cristianos exaltados. Su asesinato se produjo en el marco de la hostilidad cristiana hacia el declinante paganismo, cuando apenas contaba con 45 años de vida.
La muerte de Hipatia levantó un gran revuelo. El asesinato de esta brillante mujer fue un crimen oprobioso para los cristianos.
Hipatia nació en Alejandría, capital de la diócesis romana de Egipto. No se conocen datos acerca de la madre de Hipatia, salvo que murió en un parto.
Su padre, Teón de Alejandría, filósofo y matemático se dedicaba a la investigación y a la enseñanza en el Museo de Alejandría, fundado por Ptolomeo. Este Museo tenía mas de cien profesores que vivían allí y muchos más que asistían periódicamente como invitados.
Según registros de la época, Teón deseaba que su hija fuera un ser humano perfecto y se preocupó de que recibiera una educación científica muy completa.
Aunque Hipatia viajó a Atenas e Italia para recibir algunos cursos de filosofía, se educó en el propio Museo y formó parte de él hasta su muerte.
Hipatia vivió desde su infancia en un ambiente académico y culto, aprendió matemáticas y astronomía de su padre, quien además le transmitió su pasión por la búsqueda de lo desconocido.
Dotada de una gran belleza, se dedicó también a un exhaustivo cuidado de su cuerpo, mediante una rutina física diaria que le permitía mantener un cuerpo saludable así como una mente activa.
Pese a sus notables cualidades físicas e intelectuales, rechazó casarse, a fin de entregarse por completo a la ciencia.
Cultivó variadas disciplinas: filosofía, matemáticas, astronomía y música. Durante veinte años se dedicó a enseñar todos estos conocimientos en el Museo de Alejandría e incluso llegó a dirigirlo alrededor del año 400.
Teón
Su carácter singular de mujer entregada al pensamiento y a la enseñanza le valió el aprecio general. Educó a una selecta escuela de aristócratas que ocuparon altos cargos.
Escribió libros sobre geometría, álgebra y astronomía y mejoró el diseño de los primitivos astrolabios.Además de cartografiar cuerpos celestes, confeccionando un planisferio, también se interesó por la mecánica.
Ninguna de sus obras se ha conservado, pero se conocen gracias a sus discípulos, como Sinesio de Cirene o Hesiquio de Alejandría:
Comentario a la Aritmética en 14 libros de Diofanto de Alejandría. Canon astronómico.
Comentario a las Secciones cónicas de Apolonio de Perga.
Tablas astronómicas: revisión de las del astrónomo Claudio Tolomeo.
Edición del comentario de su padre a Los Elementos de Euclides.
Se dedicó a la enseñanza de la filosofía, centrándose en las obras de Platón y Aristóteles. La casa de Hipatia se convirtió en un lugar de enseñanza donde acudían estudiantes de todas partes del mundo conocido, atraídos por su fama.
Orestes se dejaba aconsejar por Hipatia en los asuntos políticos. El retórico Damascio escribió que Hipatia fue popular como consejera de las más altas magistraturas de Alejandría. Su alumno Hesiquio sentencia que era adorada y reverenciada en Alejandría: "Vestida con el manto de los filósofos, abriéndose paso en medio de la ciudad, explicaba públicamente los escritos de Platón, o de Aristóteles, o de cualquier filósofo, a todos los que quisieran escuchar (...) Los magistrados solían consultarla en primer lugar para su administración de los asuntos de la ciudad..."; añadía que había recibido "muchas distinciones cívicas".
Su fidelidad al paganismo en el momento de auge del cristianismo como nueva religión del Estado, fue la causa de su muerte a manos de cristianos exaltados. Su asesinato se produjo en el marco de la hostilidad cristiana hacia el declinante paganismo, cuando apenas contaba con 45 años de vida.
La muerte de Hipatia levantó un gran revuelo. El asesinato de esta brillante mujer fue un crimen oprobioso para los cristianos.